Comparte

Malintzin, también conocida como La Malinche o Doña Marina, fue una mujer nahua fundamental en la conquista del imperio azteca. Como intérprete, consejera y amante de Hernán Cortés, desempeñó un papel crucial en la comunicación entre los conquistadores españoles y los pueblos indígenas.

A pesar de que su verdadero nombre se desconoce, su apodo deriva de un juego lingüístico: «Malina» para los indígenas y «tzin» (doña) como respeto, convirtiéndose en «Malintzin«.

Su inteligencia y habilidad para aprender rápidamente español la hicieron indispensable en la diplomacia entre dos culturas completamente diferentes. Aunque su figura ha sido interpretada de diversas formas, muchos la consideran madre del mestizaje cultural que surgió tras la conquista.

Su legado, a menudo polarizado, refleja la complejidad de la historia que ayudó a escribir.